Otras personas están leyendo Complejidad Cuando se trata de complejidad, estrategias direccionales tienen el borde. La ejecución es sencilla y flexible, lo que significa principiante así como inversores experimentados y los comerciantes puedan entender fácilmente y seguirlos. Estrategias de negociación direccionales siguen una regla general: ir de largo en una tendencia alcista, a corto en una tendencia bajista. Esto reduce la automatización de estas estrategias de los requisitos técnicos y de habilidades de análisis considerablemente. Por el contrario, una buena estrategia no direccional requiere la automatización, un montón de conocimiento del mercado, la administración del dinero cuidadoso, y reglas comerciales claras, predefinido (pero sueltos) - hay conjeturas, no hay reglas de oro. Esto generalmente es por qué los comerciantes de expertos y los grandes inversores son los que recurren a estrategias no direccionales. Hay una buena razón detrás de la complejidad de las estrategias no direccionales, y que la razón radica en parte en la diversificación calculado, una técnica que minimiza el riesgo. Si bien las estrategias direccionales hacen permitir tácticas minimizando riesgos básicos - como detener las pérdidas y la posición de compensación - las opciones todavía puede ser muy limitada. Además, el nivel más alto de automatización y normas comerciales predefinidos involucrados en las estrategias no direccionales minimiza la interferencia humana y la emoción, que contribuye a la reducción del riesgo. En cuanto al potencial de ganancias, las estrategias no direccionales pueden ser mucho más estable, ya que dependen de la volatilidad esperada de los precios de las acciones subyacentes, más que de si suben o bajan. Aplicabilidad Estrategias de negociación direccionales cubren una gama más amplia de instrumentos financieros que las estrategias no direccionales. No son sólo por acciones y bonos; Opciones, fondos, divisas, futuros y materias primas también pueden ser manejados utilizando estrategias direccionales. Sin embargo, la mayoría de las estrategias de negociación direccionales son sin embargo limitadas por el hecho de que sólo se pueden practicar de forma segura siempre que el mercado está de moda. Ejemplos comunes Reorganización del patrón, seguimiento de tendencias y estrategias de movimiento promedio basado en la cruce son algunos ejemplos de las estrategias de negociación direccionales más ampliamente aplicadas. Los ejemplos más comunes de estrategias de negociación no direccionales o neutrales incluyen arbitraje, coincidente sector, las acciones de juego, par cotizando, la inversión de riesgo, a horcajadas, estrangular, agallas y la mariposa.
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